Debo decir que estaba reticente porque no sabía muy bien que esperar del trato con los perros, intente buscar la compañía mas verde que encontré y que hicieran turismo ecológico, una vez hecho, puedo concluir que como actividad es muy divertida, los perros son hiper-amigables, y en ningún momento sientes que estén sufriendo, parece mas bien un juego o deporte para ellos, sin embargo cuando volvimos a donde dormían me dio bastante mas pena, no creo que estos en concreto sean infelices ni estén maltratados pero posiblemente serían mas felices en libertad, no volveré a hacerlo…, pero es una experiencia que tenía que probar.
CHECKED 🙂